Es un proyecto de evaluación y mejora de la calidad del aire en el metro de Barcelona. El CSIC y TMB, con el apoyo de la UE, han comenzado la toma de muestras en la red suburbana de Barcelona.
El proyecto IMPROVE LIFE (http://improve-life.eu/es/), para la mejora de la calidad del aire en la red de metro, ha dado este mes de enero los primeros pasos en Barcelona con la instalación de equipos de medida en una estación de la línea 5.
El objetivo del proyecto, promovido y gestionado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y por Trasports Metropolitans de Barcelona (TMB), es evaluar la calidad del aire de las instalaciones del metro y proponer medidas para alcanzar un transporte público más limpio en beneficio tanto de los usuarios como de los trabajadores. El proyecto está cofinanciado por el programa LIFE + Environment, Policy and Governance de la Comisión Europea.
Desde ahora y hasta septiembre de 2016, se llevarán a cabo una docena de campañas de recogida de muestras en varios puntos de la red de metro de Barcelona. Se medirá el nivel de concentración de micropartículas en suspensión (PM), así como su composición química, tanto en las estaciones como en el interior de los trenes. Se medirá tanto en momentos de circulación normal como cuando se realizan actividades generadoras de polvo, como por ejemplo los trabajos de renovación de la vía, que tienen lugar regularmente.
En el laboratorio se analizarán algunos de los componentes ferroviarios susceptibles de incidir en el ambiente, como las escobillas de los motores eléctricos, los carriles, las zapatas de freno, la piedra del balasto, o los hilos y las bandas de contacto de la catenaria.
En un estudio anterior, también realizado por investigadores del CSIC con la colaboración de TMB (entre 2011 y 2012), se constató que el aire de la red de metro contiene elementos contaminantes procedentes del ambiente exterior además otros resultantes de la abrasión de las ruedas de los trenes en contacto con los raíles, las tareas de limpieza o los trabajos de mantenimiento, entre otros.
Los datos obtenidos evidenciaron que los niveles de partículas están por debajo de la media de las redes de metro de las que existen datos y varían en función de las características de cada estación. Así pues, la calidad del aire es mejor en las líneas automáticas, con separación física entre tren y andén, o en el interior de los trenes como resultado del permanente filtrado del aire a través del sistema de climatización.
Dentro del proyecto IMPROVE LIFE, se llevará a cabo una exploración más a fondo del ambiente que se respira en las estaciones subterráneas, con el objetivo de proponer medidas para reducir la presencia de partículas nocivas para la salud. Así, por ejemplo: se estudiará si la aplicación al balasto de un baño con un polímero seco evita que se desprenda polvo durante los trabajos de renovación de la vía; si se pueden escoger materiales diferentes para frenos, ruedas y catenaria que sean más limpios e igual de eficaces; o si se puede perfeccionar el proceso de renovación del aire de los túneles a través de los pozos de ventilación situados a lo largo de la red.
La primera campaña de recogida de muestras se está desarrollando en la estación de La Sagrera de la línea 5. El objetivo es analizar el aire antes, durante y después de unos trabajos de renovación de la vía, que se llevan a cabo cerca de la estación.
Los resultados del estudio serán publicados y puestos a disposición de los operadores de transporte público ferroviario en todo el mundo, ya que las recomendaciones que se desprendan pueden ser aplicadas en otras redes de viajeros más allá de la red de metro de Barcelona.
El proyecto IMPROVE (acrónimo de la denominación inglesa Implementing Methodologies and Practices to Reduce air pollution Of the subway enVironmEnt) recibe el apoyo del programa LIFE de la Unión Europea, dedicado a la promoción de acciones de protección del medio ambiente y de conservación de la naturaleza y del clima, que aporta el 50% del presupuesto total de € 813.727.
Con el proyecto IMPROVE LIFE se reafirma la colaboración entre el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA) del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), principal operador de transporte de viajeros de Cataluña, empresa que se distingue por el compromiso con la eficiencia energética, la reducción del impacto ambiental, la mejora de la calidad del aire y la promoción de la cultura de la sostenibilidad.