Finalizan la campaña 2016 en el poblado neolítico de La Draga

El próximo 8 de julio finaliza la campaña de excavaciones en el yacimiento arqueológico de La Draga, en la que participan la Institución Milá y Fontanals del CSIC. Este poblado neolítico se halla en la orilla oriental del lago de Banyoles, en la provincia de Girona. 

Materiales hallados en la Draga en la campaña de este año. Cornamenta de toro; anillo doble; colgante sobre Spondilus (valva fósil); Colgante con triple perforación sobre placa ósea.

El descubrimiento de este yacimiento se produjo en 1990 y desde entonces se vienen sucediendo trabajos periódicos de excavación bajo la coordinación del Museo Arqueológico de Banyoles. Dada la importancia del yacimiento, desde el año 2008 se estructuró un nuevo proyecto de investigación en el que participan la Universidad Autónoma de Barcelona, el Museo de Arqueología de Catalunya y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (Institució Milà I Fontanals, de Barcelona). La intervención conjunta de estas instituciones, de naturaleza y objetivos diferenciados, permite realizar una aproximación más completa a la singularidad del yacimiento, y posibilita la realización de actividades de investigación, de formación de nuevo personal investigador, de conservación de los restos y de difusión de sus datos.

La campaña de este año ha contado con la participación de un grupo de 20 estudiantes del Grado de Arqueología de la Universidad Autónoma de Barcelona, que realizan sus prácticas de trabajo de campo en el yacimiento. Posteriormente, y durante dos semanas, han participado estudiantes de distintas universidades del Estado español (de Barcelona, Autónoma de Barcelona, Valladolid, Escuela Superior de Conservación y de Restauración de Bienes Culturales de Catalunya) y de Europa (Rennes 2, en la Bretaña francesa, Tessalónica en Grecia).

Limpieza de una de las cornamentas halladas. Los trabajos han permitido finalizar completamente el sector iniciado el año 2015, en una zona próxima a la que se empezó a excavar el año 2013, y en la que se han descubierto distintas fosas que han sido interpretadas como vertederos donde se abandonaron una gran cantidad de desechos. Una de estas fosas, que se ha excavado en su totalidad este mes, presenta un relleno especial que permite proponer una interpretación muy distinta a la que se había planteado en un inicio. Los restos hallados corresponderían a la cornamenta de 2 toros, de 3 cabras y de un corzo, aparte de numerosos restos óseos de diversas especies, algunos de ellos en conexión anatómica. En la misma fosa también se han hallado otros materiales arqueológicos como hojas de azuela en piedra pulida, elementos ornamentales, así como otros instrumentos elaborados con sílex y hueso. Entre estos materiales cabe destacar un anillo doble manufacturado con hueso, del que hasta la fecha no se conocen paralelos en Europa occidental.

El relleno de esta fosa y el material hallado constituye un conjunto con una significación especial, que puede relacionarse con alguna práctica ritual, en la que algunas partes concretas de animales debieron ser depositadas intencionalmente. Podría tratarse de algún tipo de algún tipo de ofrenda en la que los animales tuvieran una significación especial. Este tipo de prácticas se han documentado otras veces en La Draga, pero no con la magnitud y claridad de la fosa estudiada este año.

La presencia de cornamentas de toro especialmente transformadas para ser exhibidas es una práctica conocida desde el inicio del Neolítico y bastante extendida a lo largo del Mediterráneo. Tradicionalmente el toro se ha considerado un animal representativo de distintos atributos como la fertilidad, la fuerza, el agua, y se ha empleado con frecuencia en ritos fundacionales de cabañas y en rituales funerarios.