Combina los datos de satélites y sensores de la ESA y la NASA. La información obtenida con este método permite evaluar el riesgo de incendios en zonas concretas o prever la productividad de los campos.
El satélite SMOS de la Agencia Espacial Europea, lanzado a finales de 2009, proporciona regularmente información de la humedad del suelo cuando sobrevuela los continentes y de la salinidad superficial sobre los océanos. Es la primera vez que una misión espacial ofrece este tipo de información, de vital importancia para mejorar nuestros conocimientos del ciclo del agua del planeta y aplicaciones climáticas. Sin embargo, la huella del sensor (50 km en promedio) no es adecuada para aplicaciones regionales, donde se necesitan resoluciones espaciales de 1 a 10 km.
En el Centro Experto SMOS en Barcelona (BEC), una iniciativa conjunta del CSIC y la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), se ha desarrollado un método para integrar los datos que se reciben del satélite SMOS (muy precisos, pero de baja resolución) con otros sensores de más alta resolución que proporcionan información de vegetación y temperatura del suelo para generar mapas de humedad con una resolución de sólo 1 km. A pesar de ser un producto experimental, y por tanto en proceso de mejora, ya se puede utilizar en determinadas zonas.
Los mapas de humedad permiten usos diversos, como conocer el contenido de agua útil en el suelo por las plantas y prever la productividad de los campos, o evaluar el riesgo de incendios en zonas concretas y por tanto, poder tomar medidas preventivas (limpieza de los bosques o crear cortafuegos) de forma más dirigida y eficaz, entre otros. En estos momentos, el Centro Experto SMOS Barcelona tiene capacidad para obtener cada 3 días un mapa de humedad de la península ibérica.
"Pensamos", dice María Piles, investigadora de la UPC y del Centro Experto SMOS Barcelona, "que este producto de alta resolución espacial y temporal puede ser muy útil para hacer un seguimiento de las condiciones de sequía de este invierno. Y estamos en disposición de hacerlos llegar a los medios de comunicación que estén interesados”. El BEC está haciendo mapas de humedad de la península, pero puede hacerlos de cualquier región del mundo. También han comenzado los estudios para investigar el riesgo de incendios forestales a partir de estos mapas de humedad.
Aunque el satélite funciona a una frecuencia restringida para la investigación científica, en algunas zonas como los Balcanes y China los datos están afectados por interferencias de emisiones teóricamente prohibidas, a veces por parte de radares militares. Los investigadores explican que "gracias a los esfuerzos de la Agencia Espacial Europea, más de 100 de estas fuentes de interferencia ya han sido cerradas o desplazadas a otras frecuencias, aunque hay zonas todavía muy afectadas".
Investigadores de contacto para la distribución de las imágenes de los mapas:
Jordi Font:
Maria Piles:
Pàgina web del Centro Experto SMOS de Barcelona:
http://www.smos-bec.icm.csic.es/smos_bec