La vida y los logros de Marie Curie, en la Residencia de Investigadores

La exposición conmemora la creación centenaria de los primeros institutos dedicados a la radiactividad: el Instituto de la Radiactividad de Madrid (1910), el Instituto del Radio de París (1914) y el Instituto del Radio de Varsovia (1932).


Poster de la Exposición.Hasta el 7 de diciembre, la Residencia de Investigadores acoge la exposición "María Sklodowska Curie, una polaca en París", como parte del programa de actividades en la Semana de la Ciencia.

Esta exposición está organizada por el CSIC, Rocaviva Eventos y la misma Residencia, con la colaboración de la Embajada de Polonia, la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, el Museo Curie, el Instituto Polaco de París y el Institut Français. La muestra conmemora la creación centenaria de los primeros institutos dedicados a las aplicaciones de la radiactividad: el Instituto de la Radiactividad de Madrid (1910), el Instituto del Radio de París (1914) y el Instituto del Radio de Varsovia (1932).

Tal y como explican las comisarías de la muestra, Belén Yuste y Sonnia Rivas-Caballero, por un lado, se pretende acercar al público "la mujer que fue pionera en conseguir muchas metas: ser doctora en Ciencias Físicas, profesora universitaria, académica, galardonada con el Premio Nobel y la primera persona que lo obtuvo en dos ocasiones, así como un largo etcétera de primeras veces que culminaron en 1995 con su inhumación en el Panteón de Hombres Ilustres de Francia".

Por otro, la muestra invita a enfocar la mirada en la persona que subyace bajo el personaje, destacando su innata generosidad, su sentido del compromiso y la solidaridad ampliamente demostrados en la Guerra de 1914, así como su entrañable entrega a su familia, a Polonia, su país de origen, Francia, su país de adopción, y a la Humanidad entera.

Suya es la frase: "No podemos confiar en construir un mundo mejor sin mejorar los individuos. Con este propósito, cada uno de nosotros debe trabajar su propio perfeccionamiento, aceptando, en la vida general de la Humanidad, su parte de responsabilidad, ya que nuestro deber particular es el de ayudar a aquellos a los que podemos ser útiles".

Más información en la web de la Residència d'Investigadors. 

La vida y el trabajo científico de Marie Curie, en la Residencia de Investigadores

 La exposición conmemora la creación centenaria de los primeros institutos dedicados a la radiactividad: el Instituto de la Radiactividad de Madrid (1910), el Instituto del Radio de París (1914) y el Instituto del Radio de Varsovia (1932).

 

Hasta el 7 de diciembre, la Residencia de Investigadores acoge la exposición "María Sklodowska Curie, una polaca en París", como parte del programa de actividades en la Semana de la Ciencia.

 

Esta exposición está organizada por el CSIC, Rocaviva Eventos y la misma Residencia , con la colaboración de la Embajada de Polonia, la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, el Museo Curie, el Instituto Polaco de París y el Institut Français.

 

La exposición conmemora la creación centenaria de los primeros institutos dedicados a las aplicaciones de la radiactividad: el Instituto de la Radiactividad de Madrid (1910), el Instituto del Radio de París (1914) y el Instituto del Radio de Varsovia (1932).

 

Tal y como explican las comisarías de la muestra, Belén Yuste y Sonnia Rivas-Caballero, por un lado, se pretende acercar al público "la mujer que fue pionera en conseguir muchas metas: ser doctora en Ciencias Físicas, profesora universitaria, académica, galardonada con el Premio Nobel y la primera persona que lo obtuvo en dos ocasiones, así como un largo etcétera de primeras veces que culminaron en 1995 con su inhumación en el Panteón de Hombres Ilustres de Francia".

 

Por otro, la muestra invita a enfocar la mirada en la persona que subyace bajo el personaje, destacando su innata generosidad, su sentido del compromiso y la solidaridad ampliamente demostrados en la Guerra de 1914, así como su entrañable entrega a su familia, a Polonia, su país de origen, Francia, su país de adopción, y a la Humanidad entera.

 

Suya es la frase: No podemos confiar en construir un mundo mejor sin mejorar los individuos. Con este propósito cada uno de nosotros debe trabajar su propio perfeccionamiento, aceptando, en la vida general de la Humanidad, su parte de responsabilidad, ya que nuestro deber particular es el de ayudar a aquellos a los que podemos ser útiles.