Inicio de las excavaciones en el poblado neolítico de La Draga

Se ha iniciado una nueva campaña de excavaciones en el yacimiento neolítico de La Draga (Banyoles). Se prevé la participación de una cincuentena de personas que colaborarán en las diversas tareas vinculadas a la excavación.

Extracción de un gran pilar de madera de roble, en La Draga.Este año los trabajos tendrán dos meses de duración y se centrarán en el denominado sector A, cerca del lugar donde se iniciaron las excavaciones en el yacimiento y como continuidad de los trabajos realizados entre los años 2013 y 2016, durante los cuales se excavó una amplia superficie. Aunque la mayoría de participantes proceden de diversos puntos de la geografía catalana, en gran medida por la participación de alumnos del Grado de Arqueología de la UAB, también acudirán personas de otras universidades del Estado español y de otros países europeos.

Los trabajos a desarrollar esta campaña se centrarán en la documentación y extracción de los postes de madera que formaban parte de las cabañas y otras construcciones. Se prevé la extracción de unos 150 postes de madera en la superficie a excavar. Simultáneamente a los trabajos de excavación, se llevará a cabo el estudio y análisis de estos elementos, de vital importancia para entender la organización del poblado de La Draga. Todos estos postes serán convenientemente muestreados para identificar el tipo de árbol empleado, como se taló, su edad, además de otros aspectos como la determinación de su genética en base al análisis de ADN.

Este año, La Draga experimenta una serie de cambios importantes como pueden ser la finalización de la excavación del sector A, la finalización del proyecto cuatrienal financiado por el Departamento de Cultura y la incoación del yacimiento como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) por parte del Gobierno de la Generalitat de Catalunya. Además, este otoño se inaugurará una gran exposición monográfica sobre La Draga producida por el Museu d’Arqueologia de Catalunya a Barcelona.

Esta situación, avalada por resultados de gran impacto científico y proyección internacional conseguidos en los últimos años y por el número creciente de visitantes que año tras año recibe el poblado neolítico de La Draga, permite prever un futuro prometedor al proyecto de investigación y de difusión articulado en torno al yacimiento.

Durante el periodo de excavación se llevarán a cabo 6 de puertas abiertas jornadas (20, 22, 27, 29 de junio y 4 y 6 de julio, de 16h a 17,30h) para poder conocer directamente el trabajo de los arqueólogos. También se continuará con las actividades denominadas “neolíticos al fresco” (1 y 15 de julio a les 20,30h.) que permiten conocer algunos de los últimos avances más significativos de la investigación. Finalmente, los sábados y domingos a las 11,30h, el Parque Neolítico de La Draga ofrecerá visitas guiadas, y el primer domingo de mes demostraciones de actividades neolíticas.

Este poblado neolítico se halla en la orilla oriental del lago de Banyoles (Girona). Su descubrimiento se produjo el año 1990 y desde entonces se vienen llevando a cabo excavaciones bajo la coordinación del Museo Arqueológico de Banyoles. Dada la importancia del yacimiento, desde el año 2008 se ha articulado un nuevo proyecto de investigación a su alrededor, en el que participan la Universitat Autònoma de Barcelona, el Museu d’Arqueologia de Catalunya y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IMF, Barcelona). La intervención conjunta de estas instituciones, de naturaleza y objetivos distintos, permite realizar una aproximación más completa a la singularidad del yacimiento, posibilitando la realización de actividades de investigación, de formación de nuevos investigadores, de conservación de los restos y de difusión de sus datos.

La importancia de este poblado prehistórico radica en que fue uno de los primeros lugares en los que se establecieron las sociedades campesinas del Neolítico en el Noreste de la Península ibérica, hace unos 7300 años, transformando el espacio que ocuparon para desarrollar aquellas prácticas agrícolas y ganaderas necesarias para su subsistencia. El rasgo más singular del yacimiento es la conservación de elementos elaborados en madera y otras materias orgánicas, hecho excepcional para cronologías tan antiguas, lo que posibilita una aproximación distinta y más completa a la comprensión de las primeras sociedades campesinas del Mediterráneo occidental.